miércoles, 15 de octubre de 2008

Espirales

Y justo cuando tenía la mente triste y apagada y estaba pensando en cerrar el chiringuito porque no se me ocurren historias y cuando no se tiene nada que contar es mejor callarse, abro el correo y encuentro un e_mail de un viejo amigo que ha encontrado su nombre en el blog y me pregunta si yo soy yo. Y digo yo, que como no se puede retroceder en el tiempo igual es que a veces lo que hacemos es adelantar a saltos. Claro, que esto de que los saltos sean de más de veinte años no termina de convencerme. Y también digo yo, a lo mejor esto es una señal para que siga por aquí contando chalaúras.